Tras cotillear un poco la sección de historia de la ciencia de la página de la Cátedra de Cultura Científica de la Universidad del País Vasco (https://culturacientifica.com/tag/historia/) voy a analizar brevemente su contenido y reflexionar acerca de este.
Hay bastante variedad en las entradas y artículos que aparecen. Encontramos análisis de libros, de cartas que han tenido relevancia en la historia de la ciencia, artículos más reflexivos o filosóficos, conferencias, historias de algunos científicos, etc. También llama la atención que no se habla únicamente de ciencia, cronologías históricas importantes en esta o historias de ciencia que puedan resultar llamativas. Se tratan temas diversos, incluyendo la ciencia, la historia, o ambas, de diferentes maneras. Normalmente, al relacionar historia y ciencia, pensamos en contar en orden cronológico el cómo se llevó a cabo X descubrimiento o cómo hemos llegado hasta los conocimientos científicos actuales y cuáles eran los anteriores. Así es cómo se suele enfocar la historia de la ciencia, o por lo menos cómo más la he visto representada hasta ahora. Sin embargo, la relación entre ambas disciplinas puede ser muy dispar y las interacciones que se dan entre ellas pueden llevar a temas y enfoques muy interesantes.
Las fuentes históricas que se emplean en la página, al igual que el tipo de entradas, son diversas. Podemos encontrar las cartas de Darwin, textos de Poe, fragmentos e imágenes de libros científicos e históricos, documentos museográficos, cuadros… Uno de los aspectos que más me ha llamado la atención (y del que trataré mas adelante) es el trato que se hace del arte en la sección. Usada como recurso de obtención de información, encontramos el arte sobre todo en cuadros e imágenes, que acompañan varias de las entradas. En algunos casos para analizarlos, en otros casos únicamente como acompañamiento al artículo, pero aportando igualmente información.
Con todo esto se obtiene una imagen de la ciencia y la historia de la ciencia bastante completa, y, sobre todo, interdisciplinar. No se entiende la historia de la ciencia como un conjunto de sucesos y momentos importantes para la ciencia actual o pasada, sino que se tiene una perspectiva de lo amplia que puede ser la historia de la ciencia, todos los elementos que pueden formar parte de ella y las distintas miradas que se pueden tener dentro de esta materia.
Lo que más me ha llamado la atención y me ha gustado del vistazo general a esta sección ha sido la inclusión de distintas formas y, en mi opinión, muy acertada, del arte. Hacerle un hueco al arte dentro de la historia de la ciencia me parece muy enriquecedor. Arte, ciencia e historia tienen mucho que aportarse de manera tridireccional. Normalmente tendemos a alejar la ciencia y el arte de manera casi total, entendiendo ambas disciplinas prácticamente como opuestas. Sin embargo, en varias entradas queda patente que la ciencia tiene mucho que aportar al arte y su historia. Quizá de esto no hubiese mucha duda, ya que se tiende a ver la ciencia como algo “mejor” (por lo menos académicamente hablando) y más útil que el arte. ¿Pero que hay de lo que puede aportar el arte a la ciencia? Esto nos cuesta algo más verlo (somos un poco cerrados a veces) y no estamos tan acostumbrados a apreciarlo, pero el arte tiene mucho que decir en ciencia y en historia de la ciencia. El arte (en especial me centro en la pintura, porque es lo que más conozco y también de lo que más ejemplos he visto en distintos artículos) nos permite conocer datos sobre la historia de la ciencia: instrumentos que se usaban, cómo eran vistos los científicos, dónde se hacía ciencia, etc. Además, muestra datos que pueden ser útiles también para la ciencia actual. En obras artísticas se pueden ver plantas, enfermedades, nubes, moluscos… bastantes elementos expresados en el arte pueden ayudarnos a entender muchas cosas en ciencia, pero para ello hay que prestarles atención. Y por supuesto, hay que mencionar la gran utilidad que ha tenido el arte dentro de la historia de la ciencia. Numerosos científicos han acompañado sus textos con dibujos e imágenes que podrían considerarse verdaderas obras de arte. Quizá desde las ciencias necesitemos abrir un poco la mente y ver más allá de la rigidez a la que estamos acostumbrados.
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