Raramente encontramos los alimentos sin envases en los supermercados, pero ¿Sirven para algo los envases?
Los envases sí son útiles, y no solo como forma de contener el producto. Para empezar, contienen información esencial, como los ingredientes, los valores nutricionales o la fecha de caducidad. Es cierto que en ocasiones también se usan para incluir en ellos publicidad más o menos engañosa. Pero hay envases que tienen funciones adicionales. Me refiero a los envases activos y los envases inteligentes.
ENVASES ACTIVOS
Los envases activos son frecuentes en los supermercados. De hecho, los podemos encontrar en todo supermercado. Se trata de envases que interactúan con los alimentos, haciendo que estos se conserven mejor. Para ello, los envases incluyen sustancias varias que mejoran la durabilidad del alimento.
Dentro de este tipo de envases destacan los envases al vacío. Con este método, se elimina el aire dentro del envase y se cierra herméticamente. De este modo, se evita la entrada de oxígeno, evitando el crecimiento de bacterias aerobias y retrasando la descomposición del producto.
Envase activo (al vacío) |
Dentro de este tipo de envases también son comunes los envases con atmósfera modificada. En estos envases, el aire se ha sustituido por una mezcla de gases que actúan como protectores para el producto. Los gases que se incluyen para mejorar la conservación del producto dependen del alimento del que se trate, pero por lo general se usan mezclas de N2, CO2 y O2 en distintas proporciones.
Envase activo (con atmósfera modificada) |
El último ejemplo de envases activos son los envases en atmósfera activa. Al igual que en los envases anteriores, se elimina el aire. La diferencia con el resto está en que se añaden elementos absorbentes o generadores que permiten conseguir las condiciones óptimas. Por ejemplo, los polímeros que acompañan a la carne son absorbentes y se encargan de absorber los líquidos y sustancias que libera el producto.
Envase activo (con atmósfera activa) |
ENVASES INTELIGENTES
Los envases inteligentes no son tan comunes en nuestros supermercados, por lo menos por ahora. He buscado este tipo de envases en Mercadona, Carrefour, Alcampo y Lidl; y nada. Ni rastro de envases inteligentes. Aún así, vamos a explicar qué son los envases inteligentes.
Son envases que también interaccionan con el alimento, pero no para afectar a la vida útil del alimento, sino para poder aportar información sobre la calidad o el estado del producto. Para conseguir esto, los envases incluyen nanosensores que detectan cambios en el alimento. Los nanosensores reconocen un determinado elemento (enzimas, toxinas, anticuerpos, cambios térmicos, eléctricos, etc.) y generan una respuesta a la señal que puede ser observada en el envase. De esta forma, se puede ver directamente en el envase el estado del producto. Gracias a los nanosensores de los envases activos se puede conocer la presencia de contaminantes en el alimento, si se ha roto la cadena del frío, pueden indicar la frescura del producto, etc.
Así que, a pesar de que todavía no están muy implantados (por lo menos en los supermercados de mi alrededor), parecen un buen método para aportar información sobre los productos de forma rápida y sencilla.
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